Hay algo en lo nuevo de Peter Jackson que huele a ópera prima, a intento de abordar muchas cosas y a más errores que aciertos. Desde mi cielo se presenta como una película fallida con momentos verdaderamente notables, que están lastrados por un guión lleno de anticlimax, con un mix de tonos que descoloca, y con otros momentos, sencillamente cursis.
El cine de asesinos en serie o psicopátas está más explotado que una mina de plata de la época romana. Es por ello que los intentos más interesantes en los últimos años van por la vía de aportar ángulos o puntos de vista diferentes, en pos de hacer el producto más atractivo. Un ejemplo de esto lo constituyó en su día Zodiac, así como Desde mi cielo.
La película, con ese "renovado" punto de vista ( y uso las comillas porque esta película se podría resumir como un cruce entre Ghost y La celda ), aguanta bien la primera media hora, en la que voz en off de la chica Salmón mezcla adecuadamente relato y tensión, hasta llegar al climax en el que se encierra voluntariamente con su asesino en la escotilla. Vemos lo bien retratada que está esa niña de 14 años, a punto de recibir un beso en la escena anterior, pero que cae en la trampa que le tiende Stanley Tucci, como lo niña que es. Peter Jackson, con el montaje paralelo de la cena de la familia, y el interior de la escotilla con planos que muestran abiertamente el digital, le provoca a uno un nudo en el estómago.
Sin embargo, tras esa escena, la película decae por momentos. Jackson se pierde en las escenas oníricas, sobrando la mayor parte de ellas, y tampoco dándonos unos efectos deslumbrantes. El mejor momento quizá sea el naufragio de las botellas con barcos dentro ante la costa.
En el mundo real, en cambio, se empieza a mezclar de una manera muy irregular el drama familiar, con la investigación e incluso el humor, con la llegada de la abuela, interpretada por Susan Sarandon. La película no es capaz de fijarse en ningún punto o tono que la sostenga, salvo las escenas en las que aparece Stanley Tucci. Pero para ser una película sobre asesinos en serie, nos encontramos con que es muy poco realista. Por favor, si Tucci tiene escrito en la cara un cartel de "me gusta matar a niñas".
Un ejemplo de lo que digo sobre los diferentes tonos es la escena donde la hermana de Susy encuentra el diario de Tucci, en la que escapa por la ventana, donde pasamos del suspense total (un poco forzado, todo hay que decirlo, parece que Tucci tuviese sentido arácnido más que oído) al reencuentro familiar. O el momento en el que Susi posee a Ruth para dar el beso que nunca pudo dar, en una escena que se inserta en lo cursi, como igual de cursi es la llegada al cielo, con esa música...
Los actores están bien, destacando sobre manera Stanley Tucci, con una composición desasosegante y desagrable a más no poder. Una banda sonora, floja; y una interesante fotografía en tonos amarillos y anaranjados, Lástima que Peter Jackson haya decidido ya instalarse en el manierismo a la hora de rodar. Alguien debería decirle que no puede estar continuamente rodando travellings y usando la grúa. Ello podría tener sentido en El señor de los anillos, pero en una película de estas características, no.
Una decepción que te deja sin respiración por momentos.