Un guión de Colin Farrell a lo irlandés que empezó con dos personajes y terminó con el ciento y la madre. Una más al estilo de short-cuts. ¿Qué le vamos a hacer?
Resulta interesante por ser ópera prima de su director. Ya veremos lo que dan de sí el plantel estelar irlandés formado en el teatro y actores consagrados.
Poco mas puedo decir, haced un acto de fe, este tipo de historias no están acabadas.
Aguardaré agazapado entre las butacas del cine a poder iluminar una cuarta estrella.