Existe toda una nueva tendencia dentro del cine de terror actual que se dedica a hacer gore serio y desagradable. El año pasado tuvimos Frontieres y éste año tenemos Martyrs. Son películas que se aprovechan del realismo que ofrecen las técnicas de maquilaje y retoque infográfico que existen hoy en día para crear escenas realmente desagradables y alimentar el morbo de aquel que se tapa la cara y mira entre los dedos. No se trata de películas divertidas como La matanza de Texas y su toque cutre y de serie B, o Brain Dead (Tu madre se ha comido a mi perro) alimentada por una premisa imposible y unos efectos cutrísimos. Tampoco se trata de algo tipo Tokyo Gore Police que aún siendo una propuesta hipersangrienta busca más lo estético que lo realista. No, éste tipo de películas buscan hacer daño a la vista y cuanto más mejor.
Personalmente no son películas que disfrute viendo. No me resultan ni polémicas ni escandalosas. Simplemente son una sucesión de escenas desagradables sin mayor mérito técnico que el de parecer de verdad, cosa que no me divierte... sino más bien todo lo contrario. No sé si éste Eden Lake irá exactamente por estos derroteros. Tengo la esperanza de que se trate más de una survival movie al uso. Sea como fuere, la supuesta polémica que la rodea me hace sospechar.
Cuanto más alejada se encuentre de las tendencias actuales, más posibilidades tendrá de gustarme.
Veremos.