Me duele muchísimo darle un dos a ésta película. Máxime cuando se trata, probablemente, del mejor y más hiperrealista retrato histórico que yo haya podido ver en cine nunca.
Voy a repetir lo que todo el mundo ya ha dicho: gran fotografía recreando los cuadros de la época (como hiciera Kubrick en Barry Lyndon), gran vestuario, gran reconstrucción de la época... pero aburrir es pecado mortal en cine.
El mayor problema de ésta película es la gran paradoja que la rodea: para hacerla hacía falta mucho dinero y que fuera a los cines la gran masa, pero es una película que no puede gustar a la gran masa... porque es MUY aburrida. A ratos la lucha por no quedarse dormido me ha evitado disfrutar de todo lo que he destacado en el primer párrafo.
La verdad es que no tengo nada nuevo que aportar a las críticas que ya se han hecho de la película: coincido en la gran reconstrucción y en el aburrimiento. Quizá me gustaría terminar subrayando que mi aburrimiento no viene porque el ritmo sea lento o porque o tenga una trama argumental tipo thriler o porque no haya aventura, es más simple: me aburre porque no me interesa nada de lo que pasa, porque cuando se condensan las historias de cinco libros en dos horas y veinte, al final se abarca mucho, se aprieta poco, y el espectador bosteza... o ronca.
Una lástima. Ojalá sea un éxito de taquilla y se hagan más proyectos de éste estilo, aunque menos aburridos.