Crítica de la película Obaba por Iñaki Ortiz

Uno coge cierta dependencia, cierta adicción enfermiza y necesita más. Necesito ir cada día al cine... por lo menos una vez. Desde luego, por mi bolsillo esto se tiene que acabar, y por la reducida oferta, claro. Pero de momento me viene muy bien esta película que proyectaron en la inauguración del Zinemaldi y que ahora tenemos en cartel, Obaba.

Ya sabrá la mayoría que se trata de una adaptación de la novela "Obabakoak" de Bernardo Atxaga, la novela en Euskera más traducida a otros idiomas. Concretamente se trata de la adaptación de una parte de la novela, que según creo debe contar varias historias (debo ser de los pocos que no la leyó en el colegio, aunque por lo que veo nadie se acuerda demasiado bien). Al parecer se trata de un mundo un tanto especial, y una historia original. Es importante decir que el escritor está muy pero que muy contento con el resultado.

El director es un viejo conocido: Montxo Armendáriz, quien se mueve muy cómodo por este tipo de historias autóctonas. Suele contar pequeñas historias, en "Secretos del corazón" se movía por Otsagabia y aquí se inventa este Obaba. Y creo que está bien que haga esta película, que tire de material interesante y cercano a su cine, porque se le estaba acabando un poco la chispa.

Creo que puede ser interesante, y tal como está el cine español (¿o esto es cine vasco?) no estamos como para dejar escapar este tipo de películas.

Lástima que ya no va a haber coloquio después.

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