Ladykillers posee el talento en pequeñas dosis de un par de hermanos que nos tienen acostumbrados mejor en estas andaduras. El soberbio trabajo de Hanks y la comparsa no menos interesante pero floja, no como otros secundarios de los Coen, la manía del enredo desesperado, la personalidad de las localizaciones y el mundo existente vuelven a catapultar a los Coen a un film muy entero, dinámico y muy decente que supera aunque solo sea en intenciones y pequeños destellos a otros muchos de las pantallas ordinarias.
Aunque e de aclarar que están muy por debajo de su habitual nivel, quizás un descanso o una mejor taquilla era necesario, pero algo forzado sí que parece este film que llegando al mismo final podría haber sido coregido en otro estilo no tan correcto sobre todo en el desarrollo. Parece algo lenta y caprichosa, con detalles, pero dejándose llevar por la preocupación que antes no he notado en los guiones de los hermanos.