Desde Londres nos llega al Festival de San Sebastián el debut en la dirección del actor inglés Dexter Fletcher (Caravaggio) y su Wild Bill. Mucho nos dice ya el título de la cinta: ¿acción y violencia?. Y probablemente mucho más pero de momento nos quedamos aquí. Wild Bill se presenta en Donostia en la sección Nuevos Directores dentro de Zabaltegi. De nuevo, un actor que prueba suerte en la dirección y encima se lo llevan a un festival. El film de Fletcher puede no convencer al público más clásico, que es más reacio a este tipo de cintas más agresivas al espectador y que tratan de contar las cosas de una manera más radical, agresiva y efectivista. Sin embargo, a los que les gusta el cine negro,la acción, el movimiento, la sangre o el "click" de las pistolas esta puede ser una inversión artística interesante. Y si hay ausencia de todo esto, seguro que no puede estar muy lejos. En su mayor o menor medida la historia de un tal "salvaje Bill" nos atrae a muchos.
En más de una ocasión se tacha al festival de andar algo escaso en cuanto a pelis de acción y más espectaculares que los dramas más clásicos. Wild Bill puede ser otra manera de invitar al público que se siente más identificado con este tipo de cintas, bien porque se les hacen entretenidas o por cualquier otra razón pero que terminan formando parte de los cientos de espectadores que llenan las salas de proyección del festival. ¿Quién decía eso de que los ingleses eran tranquilos? Aquí tenemos una sobre otro tipo de ingleses, otras capas sociales, otras realidades, un retrato sobre los desaparecidos que resurgen y forman parte del clan llamado sociedad. Si existe la otra América también existe la otra Inglaterra. Esperemos no darnos ningún tropezón. Promete.