La enternecedora historia que se presenta, puede ser tan dura como triste en la gran pantalla. Film al que le ha costado llegar a nuestras pantallas, narra las historia de amor trabajoso entre un fotógrafo con una enfermedad terminal y una joven y guapa clienta que desconoce el problema.
Con cierto aire de sonrisa a medias, el drama es inverosímil pero cierto, y la calidad de temperamento del cine asiático, firme a sus intenciones, ayuda a asimilar los dramas como un conjunto que hay que descubrir en su totalidad, aunque a veces no resulten demasiado poco amenos.
Tranquilita producción de buenos cimientos pero que se acaba despidiendo con sensación amarga. Interesante oferta más allá de risas tontas.