Crítica de la película Mi nombre es Harvey Milk por Beiger

Llego un poco tarde a ésta precrítica. Mis compañeros Sherlock e Hypnos ya han dicho todo lo que se podría decir de Gus Van Sant (que tiene dos facetas: independiente puro e industria de calidad) y sobre el buen reparto (capitaneado por un Sean Penn que, al parecer, va directo a por el oscar).

Me interesa de ésta película tanto Gus Van Sant como Sean Penn. Pero me interesa también que se puede hacer con un biopic al uso en el 2009. No espero grandes revoluciones, seguramente siga el estándar de "ascenso, éxito, descenso a los infiernos y redención", pero me gustará ver si realmente se trata de una película escrita por un robot o tiene auténtica alma.

Por otro lado la temática homosexual es un arma de doble fijo. Me da miedo enfrentarme a una película llena de tópicos al uso que repita las mismas tesis que ya oímos una y otra vez de manera machacona en prensa y televisión. Me gustaría oír un argumento medianamente original o una idea que me haga reflexionar. Esto lo veo más difícil, pero la esperanza es lo último que se pierde.

Sea como fuere, apostar por ver ésta película es apostar sobre seguro. Su resultado, muy probablemente, se mueva entre lo muy bueno y lo excelso.

Veremos.