Crítica de la película Asesinato justo por Romulo

Asesinato justo, esa película publicitada como el nuevo cara a cara de De Niro y Pacino, la dirige Jon Avnet. ¿Y quién demonios Jon Avnet? Bien, bien, permitidme que me centre en él y no en De Niro y Pacino, que son ya poco reclamo.

Avnet era un atrevido productor de televisión con ínfulas de creador de cierto nivel dentro de la industria hollywoodiense y con una idea revolucionaria: filmar una película íntegramente sobre una pantalla verde, para luego dotar a sus imágenes de escenarios completamente digitales que permitirían al film funcionar como una suerte de comic en movimiento. ¿Les suena? Sí, alguien hizo algo parecido en 2005 con Sin City.

Pero él ya comenzó a hacerlo en 2003. El proyecto se tituló Sky Captain y se estrenó en 2004, bajo la dirección de un muchachito con ganas de despuntar como director, Kerry Conran. Para desgracia de Avnet, el film fue un absoluto fracaso en taquilla y Conran solo fue capaz de dibujar una aventura simpática y resultona, pero algo sosa; le faltaban diez minutos más en la cocina.

Con ese fracaso, las esperanzas de Avnet se fueron al traste. Hollywood dejó de verlo como un productor visionario al que tener en cuenta cara al futuro y lo metió en el mismo saco de tantos otros tipos a los que ofrecer, de tanto en cuanto, proyectos de segunda fila. Y ahí sigue, produciendo y dirigiendo thrillers de tres al cuarto. Tonterías como 88 minutos, en la que ya dirigió a Pacino.

Ahora nos ofrece otra de polis entre negros malotes. Para colmo la película no puede venderse a sí misma como el primer cara a cara entre Pacino y De Niro, así que lo hace con esa milonga de "la primera peli en la que De Niro y Pacino salen mucho juntos porque en Heat casi no coincidían". Marketing tercermundista.

¿Y la película qué? Una de polis como llevan haciéndose 30 años. Las clásicas discusiones, Pacino lo más enérgico posible para demostrar que sigue en forma y que es el mejor, De Niro pasando notablemente del tinglado como sólo él sabe hacerlo, Donnie Wahlberg imitando el gesto de macarra cabreado de su hermano y algún que otro tiroteo a ritmo de hip hop.

Poca hostia.