Crítica de la película Calle Santa Fe por Keichi

A la hora de valorar un documental, hay tres aspectos principales a analizar: Qué se cuenta, como se cuenta y desde que punto de vista se cuenta. Sobre el drama de la dictadura chilena hemos visto ya muchas películas, por citar un ejemplo, la fantástica Pinochet y sus tres generales, de José María Berzosa. En cuanto a la forma de narrar los acontecimientos del pasado, cabe esperar que el documental recurra a testimonios de los implicados, videos de la epoca y demás documentos habituales en este tipo de producciones. Ahora bien, lo realmente interesante de esta proyección radica en el punto de vista, el enfoque que la directora del film decide dar a su documental. Un enfoque que, en este caso, no puede ser más personal.

Y es que esta película está dirigida por quien fuera compañera de Miguel Enríquez, líder del Movimiento de Izquierda Revolucionaria asesinado por la DINA, y participe directa en esos terribles sucesos que la condujeron a un aborto, un encierro en el hospital y finalmente al exilio. No cabe duda de que Carmen Castillo tiene mucho que decir acerca de aquellos desgraciados acontecimientos a lo largo de las casi tres horas que dura su documental. Se tratará sin duda de una mirada desde la distancia hacia su tierra (como bien prueba el hecho de que este film Chileno se haya realizado desde Francia y Bélgica) pero a la vez dirigida a sus propios compatriotas. El que su proyección en la sección Un Certain Regard de Cannes conmoviera sobremanera a todos los asistentes viene a demostrar que, en cierto modo, la frontera que separa nuestros mundos cada vez queda más cerca.