Es muy loable el esfuerzo de Antonio Banderas(La leyenda del zorro, Déjate llevar) por alejarse del cine de Hollywood, para ponerse otra vez tras la cámara, (su primera película como director fue “Locos en Alabama”) esta vez en un proyecto muy personal, rodado casi integramente en su Málaga natal. Pasión y entrega se adivinan en este film, que seguro que encierra mucho simbolismo y muchas segundas lecturas muy intimas del director, recordando sus orígenes.
Banderas, que leyó la novela homónima en la que se basa la cinta, escrito por el también malagueño Antonio Soler, quedó totalmente prendado del libro, y encargo al autor que hiciera la adaptación del guión.
En el reparto, podemos encontrar importantes nombres, como Victoria Abril(Tirante el blanco, El séptimo día) o Juan Diego(Vete de mi, El triunfo), los dos antiguos compañeros de Banderas en producciones españolas antes de dar el salto al cine norteamericano. Todo indica una vuelta a sus raíces y por no repetirme en todos los datos, os remito a la completísima precrítica de Sherlock.
Una bonita historia, de jóvenes que no se rinden ante lo establecido, que quizá se ralentice demasiado por las descripciones y los detalles, pero agradable de ver e interesante para meditar. Un pequeño lujo para el actual renqueante panorama del cine español.