El perfume es una película que, dada la cartelera actual, pasa para mí totalmente desapercibida. Además, al ser la adaptación de un bestseller, enseguida me saltan las alarmas: ¿qué se puede esperar de un libro que tiene una historia hecha para ser leída por todo el mundo? La respuesta es sencilla: algo ligero y facilón.
Se trata, además, de un drama en formato de thriller y, ¿qué sabemos sobre los thrillers? ¡QUE ESTÁN MUERTOS!
Sin embargo, mis colegas precríticos coinciden unánimemente en destacar lo contrario. Hypnos, por ejemplo, intuye que será una película al mismo tiempo comercial y de calidad. Las postcríticas de Sherlock, ObiWan y Munny reparten cuatros y cincos a diestro y siniestro. Es inevitable: tengo que verla y opinar.
Si es verdad que le encuentro cierto interés. Y es que, si el reto de reflejar los olores en una novela es grande, el reto de hacerlo en una película no es menor. Ahí es donde la calidad que Hypnos intuye deberá verse reflejada.
Sólo espero no revolverme en la butaca mientras mascullo cosas sobre la madre de los precríticos. :-D