April Snow no está a la altura del nuevo cine coreano. Eso está claro. Pero como película fuera de contexto no está mal.
La historia ya ha sido contada, pero esta en concreto está contada bastante bien. Con gusto. La dirección es correcta y los actores están bien. No es que haya nada malo en esta película, pero básicamente pasa sin pena ni gloria por delante de los ojos del espectador.
Hay que decir que eran ya uno ojos que empezaban a estar cansado cerca del ecuador del festival y con una capacidad de concentración algo mermada.
Se ve a gusto pero tampoco aporta nada especial. Me quedo con Kim Ki-duk.