Probablemente la menos interesante de
las tres Blancanieves de 2012, o al menos la más dirigida a un
complaciente público adolescente. Poco oficio en la dirección y en
el guión, con nombres entre novatos y poco vistosos. Una historia
que pretende alejarse de lo infantil del clásico para ofrecer un
género más cercano a la aventura, épica fantástica. Entre Willow y El señor de los anillos, con toques de elegante magia
poética de cuento de hadas.
El mayor reclamo lo encontramos en los
dos personajes principales. La malvada madrastra es un papel que le
queda a medida a la bellísima Charlize Theron, que ya sabemos
por su actuación en Young Adult y en El hormiguero (¿por qué no? eso también fue una actuación),
que no tiene problemas para adoptar la actitud altiva y vanidosa que
necesita el personaje. Y en el papel de Blancanieves, la estrella
juvenil del momento, Kristen Stewart a quien ya no veo tan en
su papel. Veremos, si da la sorpresa, pero de momento esta chica no
está demostrando demasiadas capacidades, digan lo que digan sus
hordas de fans. La réplica masculina la dará Chris Thor Hemsworth.
Seguramente el nombre más interesante
asociado al proyecto sea el de uno de los mejores compositores, James
Newton Howard, que parece que este año está en los taquillazos
juveniles (Los juegos del hambre) y que nos ha dejado una composición
convencional de épica fantástica pero resultona.
Para verla sin expectativas, con el
cerebro a media luz y un buen paquete de palomitas. Confiemos en que sus guiños no resulten demasiado manidos.