El ambiente de la Semana de Terror tiene su punto, pero lo cierto es que no está recomendado para cualquier tipo de película. Hay películas en las que dicho ambiente se agradece, y hay otras en las que, simplemente, molesta.
Shinya Tsukamoto es un director al que he conocido hace poquito, gracias a mi compañero Beiger, que nos trajo "Tetsuo" al 3º finde precrítico.
"Tetsuo" me pareció una gran película que funciona perfectamente en su primera mitad, y que es sólo hacia el final, con momentos muy Bioman, cuando desfallece. Pero es un cuatro estrellas, sin duda.
El resto de su filmografía me es absolutamente inexplorada, aunque me encantaría poder abarcarla, y heme aquí, que encuentro una gran oportunidad en el Principal, con una película que sí que se va a disfrutar con este ambiente.
Shinya Tsukamoto es uno de estos directores que no necesitan presentación. Era broma, un chiste friki.
Lo más reseñable de él sea que atesora una auténtica colección de premios en los festivales más importantes de cine de terror y fantástico: Sitges, Fantasporto, Pusan, Neüchatel, Gijón, Bruselas...y que ha llegado, incluso, a rebasar las fronteras de los festivales de género para colarse de improviso en la Mostra de Venezia.
Este film de Tsukamoto me lo espero virgen, de territorio inexplorado, de un desequilibrio vigoroso, de una amplitud dialéctica que desborda los cánones de lo admisible...todos los ingredientes de un producto fallido con destellos geniales, enigmático y con mucho magnetismo.
Un placer encontrarle en Donosti, señor Tsukamoto.