Desde los años 60, compitiendo en la televisión estadounidense, con famosos perros de siempre como Lassie (Lassie), Rintintín o Scobi Doo, Superdog surgió pero no fue el más querido, la Disney desea ahora lanzarlo en su última invención en imagen real, a lomos de un cariñoso y espabilado can, al servicio de los pequeños de la casa.
Sin demasiadas rarezas, historia lineal donde las haya, para un personaje que resulte ejemplarizante y suficientemente hermoso para unos niños que no estén pensando en moderneces del celuloide, demasiado pequeños para enterarse de mucho.
Como nota de curiosidad, la presencia de James Belushi, que se recordará en Superagante K-911 con nostalgia y cabeza gacha después de tantos años.
Ideal para llegar al cine en familia.