Crítica de la película Eva por Iñaki Ortiz

Escándalo films, la productora de la ESCAC (escuela de cine de cataluña) es ahora mismo uno de los aires más frescos que recorre nuestro cine. Lo mismo se lanzan con un drama familiar muy bien afinado como 3 días con la familia, que se atreven a jugar con los nuevos formatos en Blog (con la que Eva comparte varios guionistas). Lo que nos ocupa ahora nos puede ser más interesante: inteligencia artificial, de la seria, con ese punto melancólico y ese concepto de humanidad tan difuso. Con un acabado que, aunque humilde, no fallará, y podrá codearse sin miedo con producciones de todo el mundo.

Es el primer largometraje de su director Kike Maíllo, pero ya le conocíamos de algunos cortos interesantes, y de los videoclips para Manos de Topo, que a mi modo de ver, es lo mejor que se ha hecho en esta disciplina en España en mucho tiempo. Su cierto gusto extraño encaja perfectamente con esta obra de ciencia ficción y su estética encaja perfectamente dentro de la escuela catalana. Esos toque modernos muy de diseño, con un estilo que sin dejar de ser sobrio y elegante, busca diferenciarse y ser algo informal. Nada estático.

Sin duda, uno de los proyectos españoles más importantes del año. Inauguró el festival de Sitges donde, como era de esperar, gustó bastante. Ahora podemos verla en cines comerciales, lo cual, para una película española ya es decir, pero aquí no acabará la carrera de esta película, seguro.