Segundo largometraje de Daming Chen, más conocido en China por su faceta de actor que por la director.
En esta ocasión nos presenta una película en clave de humor en la que tendremos varios de los temas favoritos de la población china como protagonistas absolutos.
Si alguien va con la idea de que será una de esas películas cómicas delirantes, que se lo quite de la cabeza.
Como suele suceder con las comedias orientales, su humor no es siempre bien tolerado por nosotros, así que con precaución acerquémonos al cine a ver una pequeña historia con dos o tres buenos gags y mucha alegría vital.