Crítica de la película La proposición por Obi-Wan

Este tipo de comedias de Hollywood utilizan la misma receta de embrollos y situaciones embarazosas para ensalzar poco a poco un romanticismo que acaba engatusándonos entre pequeñas sonrisas provocadas a base de ligeras humillaciones variadas. El motor de la trama puede cambiar, pero siempre son grandes farsas que atraen al espectador por el morbo de engañar y ocultar la verdad a todos y el humor facilón que desprenden las situaciones que dichas mentiras provocan.

Así que el motivo de mi escasa confianza en este título es la utilización de esa misma fórmula para crear un film, que en el mejor de los casos, finalmente puede convertirse en un producto fácilmente consumible y entretenido. Pero nada nos evitará tener una sensación de déjà vu tras su visionado y compararla para bien o para mal, con una larga lista de comedias fotocopiadas unas de otras.

Anne Fletcher dirige su tercer largometraje, tras Set-Up y 27 vestidos, demostrando ser una realizadora que le tiene cogido el punto al romanticismo más comercial y rentable. En cambio en el guión hallaremos a Pete Chiarelli, un novato en estas lides. La cinta esta protagonizada por Sandra Bullock (Premonition, La casa del lago), por la que no parecen pasar los años y Ryan Reynolds (Definitivamante ,quizás, X-men orígenes: Lobezno).

Recomendada si optas por una comedia ligera, con un pequeño tono sensiblero, que haga pasar el tiempo rápido y sin complicaciones.