Se presenta en la sección oficial del
festival de San Sebastián la segunda película como directora de la
actriz Sarah Polley, después de Lejos de ella, una película
que tuvo una buena aceptación en general. Se trata de una comedia
agridulce que habla de lo que terminan hablando casi todas, de dudas
amorosas, de tomar decisiones, de saber lo que uno quiere.
Michelle Williams es la actriz
protagonista, la de las dudas. Un actriz a la que hemos visto hace
poco en Shutter Island y que su siguiente papel será el de, nada más
y nada menos que Marilyn Monroe. Junto a ella, uno de los principales
representantes de la llamada nueva comedia americana, Seth Rogen,
que desde que ha adelgazado un poco se puede permitir papeles menos
chistosos.
El tono de la película estará alejado
de las comedias románticas estándar que inundan las salas con las
mismas historias y con los mismos resultados. Aunque los elementos
que manejará estarán cerca de aquellas, será más reflexiva, menos
tópica y desde luego, más inteligente. El hecho de que Rogen
participe en la película nos indica también que no se pasará
tampoco de independiente.