Esta debe ser una gran película, pues cuenta con la mayoría
de los elementos que los críticos pedimos al cine. Es brutalmente sutil, valga
la paradoja. Es precisa, disecciona las particulares condiciones de la Alemania
de principios de siglo como un cirujano de pulso firme, y las plantea como
caldo de cultivo para un futuro de horror, sin que por ello nada resulte
forzado a mal traído. El tratamiento de los personajes es delicado a la vez que
profundo. La ambientación de época está lograda a todos los niveles. La
planificación y la fotografía son excelentes, no falla un solo plano. El
desarrollo del guión avanza lento pero seguro. Si la objetividad tuviera cabida
en la crítica de opinión, diría que objetivamente se trata de una excelente
película. Y sin embargo... algo no funciona.
Quizá sea el tono extremadamente aséptico que envuelve a la
obra. Es posible que el problema sea la excesiva contención. Hacia el final se
carga demasiado las tintas con la intriga en una serie de escenas que,
comparadas con el resto de la película, resultan frenéticas, y anuncian una
resolución u orientación que finalmente no llega. Varios de los hechos finales,
no es que queden abiertos, es que parecen no encajar con ninguna hipótesis.
Esto no sería del todo malo si, como digo, no se hubiera enfatizado la
investigación personal del profesor hacia el final. Su excelente dirección y fotografía es
tan tremendamente clásica que es fácil observar cada mecanismo e intención en
las composiciones demasiado racionales y estudiadas. Esto no ocurría en Caché, donde su
dirección era mucho más sofisticada con planos de apariencia casual (seguramente nada casual). Por otro
lado, planos como el de la violencia tras la puerta quizá ya están demasiado
manidos. Su guión toma decisiones mucho más arriesgadas, valientes e
innovadoras que su elegante dirección.
Por lo demás, y a pesar de mis matizaciones negativas, sin duda esta es
una de las películas más interesantes del año. Quizá "objetivamente" excelente,
y subjetivamente algo carente de la energía de una gran obra. Su mayor ventaja
es que difícilmente envejecerá. En todo caso yo prefiero el cine a mano alzada.