Crítica de la película La rosa de nadie por William Munny

Desde Cuenca, ciudad íntegra de rodaje, y desde la Facultad de Bellas Artes de la misma ciudad, llega este film que por tanto emerge desde el punto de vista artístico más académico aunque disfrute de las ganas de independencia y cierto vanguardismo de forma y modelo.

Su título, rescatado del libro de poemas de Paul Celan (Niemandsrose), ya da muestras de sus intenciones aunque no por ello hay que olvidar el carácter cinematográfico en un drama duro de personajes profundos con Ana Otero (Un buen día lo tiene cualquiera o Amor en tiempos revueltos) captando la personalidad de la cinta.

Tengo buena curiosidad, distinta de la mala, por conocer los entresijos de una historia completamente desgarrada, sin concesiones preciosistas pero talentosa, y cuadrada en líneas de favor para con el drama agónico, la obsesión propia del mundillo y el ser humano desatado.

Todo esto promete una película premiada con el Premio del Jurado y Mención de honor del jurado en el Festival IBAFF. Una película nada comercial, nada sencilla…lo digo por alejar a los comerciales, porque no lo es.