El reducido público que puede recibir con buenos ojos este film, será el que posea en su memoria la fantasía poco plausible de los anteriores productos de estas aventuras futboleras, La panda del patio o Las fieras fútbol club.
El poco talentoso trabajo que se basa en mostrar más que en filmar, puede cautivar a pocos jóvenes con exageradas y tontorronas formas de diálogo que se desvanecen poco a poco como el plantamiento de heroísmo de unas personajes un tanto sacadas de la más tierna idea de bondad y lucha por vencer. Qué bonito pero que poco práctico, no sé si es demasiado justo enviar el mensaje de ser y punto el mejor como fieras.