How to get ride of others tiene una premisa argumental muy interesante y estimulante. El director, como él mismo ha comentado en la presentación de la película, trata de reflexionar sobre la inmigración preguntando a los propios daneses sobre qué aportan a la sociedad. Siendo el objetivo declarado de ésta película hacer una reflexión política yo me pregunto: ¿y cuál es la conclusión de esa reflexión? La película en ese aspecto no llega a ningún lado.
Por el camino vemos algún gag divertido como el del político que descubre que sus padres eran hermanos, etc. Sin embargo, tampoco a nivel cómico es que la película sea el despiporre. Lo que si tenemos a porrillo con una enorme cantidad de diálogos incesantes. Una verborrea que acaba por cansar al más aplicado de los espectadores y que le hace desconectar totalmente de la película.
Al final no funciona ni como comedia satírica ni como reflexión política. Lo único que queda es una serie de inacabables diálogos aleccionadores y aburridos.