Lo curiosa de esta película es que me ha resultado hasta divertida, ojo, en algunos momentos. Ben no parece tener lo suficiente para hacerse con personajes demasiado atractivos desde el punto de vista de la comedia, pero aquí, bien ayudado por el guión bastante exagerado pero decente, se esconde y hasta consigue acercarse al público a base de caras de desesperación contenida.
La caricatura de la estorsionadora, es demasiado triunfal y ligera como para hacer caer todo el peso del film en ella, y durante bastantes minutos esto sucede sin demasiado autoridad, por lo que decae bastante, hasta convertirla en lo que le salva, una comedia romántica algo estirada, que te permite llegar al final sin demasiados miramientos.
La escena final, alocada y muy permisiva con la tolerancia del público, tiene un toque tierno que llega, bien actuada, bien respetada y distanciada del resto con unos ojos preciosos de una actriz secundaria demasiado bella para suplicar.