El novelista Neil Gaiman y el director Matthew Vaughn (que prepara Thor pevista para el 2009) se han atrevido con la historia de las historias en el mundo de la magia y el poder de las estrellas. Un mundo con un visitante codiciado que todos tratarán de someter y probablemente otros pocos proteger.
Cine no demasiado infantil, de esas películas a las que todas podemos ir incluso sin acompañar a los pequeños de la casa. Parece poseer esa elegante manera de divertir con los efectos de Harry Potter, alrededor de una magia servil a un mundo diseñado por y para creer e imaginar más allá, además de una excelente manera de trabajar los escenarios, la ambientación y las actuaciones. Si la banda sonora es ya genial que más se puede pedir, pues estaríamos ante una producción que ha podido beber y sober de las últimas grandes películas de este género.
El capítulo de estrellas es largo, Claire Danes como protagonista (también en El caso wells o en la próxima El atardecer) y su compañero de peripecias Charlie Cox (El mercader de Venecia, Casanova o Tirante el blanco), pero sin olvidar a los relevantes que seguro da gusto verlos en estas lides.
Michelle Pfeiffer (en las últimas Hairspray y El novio de mi madre), Robert De Niro (El buen pastor o como director y actor en El escondite), Peter O´Toole (Lassie o la bien recibida Venus), Rupert Everett (Tercera identidad o People) o Sienna Miller (Factory girl, Interview o la próxima The edge of love).
En resumidas cuentas una opción de la cartelera que no quiero perderme, por amante del género, por curiosidad innata y por la chispa decente que parece transmitir el film.