Llego a esta película por la entregadísima recomendación de alguien cuya opinión tiene mucho valor, por cuánto conoce el mundo desde dentro, y por un sentido común y buen gusto más que demostrados. Así las cosas, no puedo hacer menos que prestar mi atención sobre un título que, intuyo, pasará algo desapercibido por nuestra cartelera.
Intentaré pues llamar yo la atención sobre ella. Y empezaré intentando enganchar al lector con aquello que puede resultarle familiar, por ejemplo el rostro magnético de la francesa Melanie Laurent, una de las protagonistas de Malditos bastardos, la última locura de Tarantino. Ella estaba entre las mejores virtudes de aquella película, y me alegra descubrirla también aquí.
Lo cierto es que a un nivel "popular" se me acaban los puntos de apoyo: Dirige el rumano Radu Mihaileanu, es decir, un nombre completamente desconocido para todos. Tiene algún trabajo esporádico como director a sus espaldas, siempre en Francia. Este dato es importante...
...no tanto por su educación cinematográfica francesa (por decirlo así), sino por su condición de exiliado del regimen comunista en su país natal. He tenido la fortuna de conocer a un ex ciudadano rumano (en este caso del ámbito musical y exiliado en España) y he podido comprobar en primera persona hasta qué punto algo así marca de manera indeleble la vida de un ser humano.
Por eso, no es difícil aventurar que el trasfondo político será vital en El concierto. Lo que me gusta es que no sea un protagonista único, sino un colchón sobre el que levantar una trama centrada en un pequeño grupo de seres humanos, y además con otra de mis debilidades como guinda del pastel: La música clásica.
Por corazonada y por atención a una recomendación, me apetece este concierto. Os animo a venir.