Precisamente en estas fechas tan proclives al enaltecimiento del cine norteamericano, mi cuerpo me está pidiendo otra cosa. Quizá se deba también al gratísimo sabor de boca que me dejó "Caché", pero cada vez estoy más cercano a un cine más europeo, más alejado del correctísimo y académico cine Made in USA.De ahí que, si bien objetivamente creo que esta película no llegará al 5, la necesito como agua de mayo. Porque si ya me deleité con la fuerza y vigor de uno de los Grandes Barones del Cine europeo, Michael Haneke, ante la llegada de otro de esos Grandes Barones, no puedo más que rendirme.La película no será ese 5 tan absoluto que fue "Dogville" porque juega en su contra la repetición de un mismo esquema, lo que puede hacer que la limitación que hizo convertir en virtud, vuelva a convertirse en limitación.La presencia de Bryce Dallas-Howard no será tan poderosa como la de Nicole Kidman, y es que las comparaciones siempre son odiosas.Pero ahí seguirá estando el equipo técnico de la anterior película, y un elenco de actores que se refuerza con las presencias de Willem Dafoe o Danny Glover.No me gustaría que esta película se utilizase para introducir un discurso excesivamente político, que es la pega más evidente que le veo a la idea de crear una Trilogía ambientada en EEUU, pero espero y deseo que esta película no pierda el aroma a experimento, a análisis, a supuesto de hecho teórico, a ese cine tan maravilloso, a la par que, recalcitrantemente intelectualoide. En definitiva...cine europeo.