Uno de los tipos más versátiles del cine, Michael Winterbottom, véase Camino a Guantánamo, Génova, Código 46, El demonio bajo la piel, La doctrina del shock, Tristam Shandy o Un corazón invencible, no hay mucho más que hablar, se incorpora a la comedia de manera más pura con este film que se estrena en nuestro país a pesar de su creación en el 2010.
Humor inglés demasiado local, ese parece obvio, en una road movie dentro de una isla, y esto lleva sus limitaciones, a favor de una originalidad suma dentro del género y la restauración como fondo y tapiz.
A groso modo no creo que sea una pérdida de tiempo, que quede claro, pero seguramente nos dejará el resquemor de no agradar a un especial humor latino mediterráneo que los hombres de la niebla no creo que sepan arrancar bajo su fórmula. De las suyas puede que la peor, pero demostrando que es capaz de llevar a buen término el rodaje entre un melón y un juego de repuesto de gafas.