Crítica de la película Mar adentro por Iñaki Ortiz

“El juego de Hollywood” es una película que habla de los entresijos de ese subuniverso podrido que mueve grandes sumas de dinero y que poco tiene que ver con el arte. Odioso Hollywood, Satán y todo eso. Pero quizá deberíamos mirar hacia dentro. Hacia nuestro cine, y ver el juego de caracoles (y digo caracoles porque ni siquiera tenemos un lugar bien definido). Es un juego en el que lo verdaderamente importante es la política y lo moderno y de izquierdas que es cada uno. Un cine de pancarta y en el que disfrutarían teniendo unos cuantos Miguelitos Moore. Un juego de caracoles en el que gente como Garci están relegados a mera comparsa, al fin y al cabo están todo el día pensando en planos y miradas y se olvidan de las mujeres maltratadas. Un juego donde Alex de la Iglesia es ese tipo extraño que nos da dinero y que hace películas menores. Un juego donde reírnos de ese cine americano, ¡pobres mentes débiles atormentadas por la comida rápida!


El juego de caracoles apesta. Se están cargando nuestro cine, cuando parecía que estaba remontando. No son capaces de mirar atrás, a nuestro cine en blanco y negro, y darse cuenta que no tenía por qué ser cine español, era cine y punto, sin complejos ante los americanos. Están tan centrados en el aquí y ahora que no ven que los vecinos franceses hacen cuando quieren cine de verdad. No se dan cuenta que los directores que despuntan en este cine son precisamente los que escapan de los clisés del cine de caracoles, Almodóvar, Médem, Garci, Alex de la Iglesia... ninguno de ellos tienen la estúpida idea de hacer cine de caracoles, prefieren hacer su cine, cada uno el suyo, el que les sale de dentro (por no decir de otro lado). Y hasta ahora a Amenábar también lo podíamos incluir en la lista.

Comprendo que quisiera cambiar de registro, hacer un drama, pero no veo que sea necesario entrar de lleno en el cine de caracoles para eso. Pienso que es un cobarde, un vendido, sí todo eso pienso. El camino fácil pero menos honrado para con él mismo. O lo mismo estoy equivocado y casualidad él siempre ha querido hacer esto. Lo mismo no. Mi única esperanza es que esto sólo sea una pequeña incursión para luego seguir probando géneros. Pero me temo que una vez que entras en el juego de caracoles ya no puedes salir.


De todas formas, porque lo va a hacer bien, le doy cuatro estrellas.

PD: ¿Qué diantres hace Belén Rueda junto a ese actorazo que es Bardem?


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