"Gabrielle" trata de descubrirnos que ocurre cuando se acaba el amor, cuando una casa se queda vacía de este sentimiento sin razón aparente ni singular. Una pesada carga para un público que no quiera presidir tamaña intención filosófica o sentimental, pero un enorme ejercicio de inmersión analítica para el que pretenda precisamente disfrutar de esta premisa.
Patrice Chéreau ha destacado antes que en el cine en teatro con las adaptaciones de clásicos, y también más tarde, mientras realiza films, en montajes operísticos, con una lista de películas destacada en su haber, "El hombre herido", "La reina Margot" o "Su hermano" entre otras.
Espero un drama que en su primera parte del film resulte hasta entretenido pero que al final recaerá en el peso de la obligación de centrarse en la temática a golpe de pausas y conversaciones silenciosas. Un plato de gusto refinado, con intenciones honestas pero difícil de tragar en cualquier caso. Los posibles condicionantes de la película pueden ser que las escenas acaben demasiado teatralizadas, creo que no, convitiéndose en una elegante y segura fórmula de película seria a lomos del sentimentalismo.