Crítica de la película Ice Age 3: El Origen de los Dinosaurios por Obi-Wan

Y aqui vuelven otro verano los personajes de la edad de hielo. Lástima que no serán tan refrescantes como debieran, porque ya se demostró en su segunda parte que la exitosa fórmula de la primera entrega con su frescura y mordacidad se había agotado, limitandose a repetir gags, con una evidente falta de ideas nuevas y con un hilo argumental cogido por los pelos.

En esta ocasión, han ido a lo grande (literalmente hablando) y para intentar una mayor espectacularidad a la que sin duda ayudará el formato en 3D, han escogido a los dinosaurios  para alimentar la trama. Volveremos a ver como la ardilla y su imperecedera bellota vuelven a su interminable persecución, sometiendo a este personaje a las mas inefables torturas. Puede que halla alguien a quien este ejercicio de golpes y humillaciones agote, pero esto es como el Coyote y el Correcaminos, ya se sabe lo que hay, pero siempre consiguen hacerte reir.

No se puede negar que será previsible, con el implicito mensaje de amistad y compañerismo y con una calidad técnica menor que sus rivales Pixar o Dreamworks. A los más pequeños, seguro que los embrollos en los que se meterán sus protagonistas les divertirá. Para los más adultos, por lo menos espero que sirva para pasar el rato, sea minimamente entretenida y una justa excusa para estar hora y media fresquito en el cine, sin tenerte que arrepentir del dinero pagado en la entrada.