El cine italiano, en general, no me gusta. Pero concretamente el cine de terror italiano me parece horripilante. Recuerdo grandes bodrios se la Semana de terror como Tre volti del terrore (¿pero qué era aquello?), Supersonic Man (perteneciente a la retrospectiva de superhéroes europeos) o una película de zombies de cuyo nombre no puedo acordarme en la que no había zombies ni había nada.
Pupi Avati, el director de Il Nascondiglio debe ser al parecer un auténtico clásico del terror italiano de efectos cutres y tetas. Si ese tipo de cine no lo soporto en su época... ¿cómo lo voy a soportar ahora que llega con 30 años de retraso? La única posibilidad de que disfrute ésta película es que sea tan lamentable que me pueda reír de ella junto con el resto de la parroquia de la Semana de terror de San Sebastián.