4 estrellas que las llena él solito, Bruno Ganz, un actor hasta ahora desconocido para mí, (y supongo para el gran público en general), con una actuación impresionante del fuhrer alemán. No sé como se sentiría Hitler en esos momentos finales con la llegada de los rusos, de la espantada de sus generales y demás, de la no llegada de los regimientos 9, 12… que tenían que llegar para hacer una encerrona al ejército soviético, pero la sensación de realismo es auténtica.
Merece la pena, sólo por ver a Bruno Ganz, pero el resto de la película está muy bien. Esa sensación de agobio durante toda le película con el sonido de las bombas, las ametralladoras, los aviones... Me ha parecido todo bastante real, quizá algun personaje demasiado “bonito” empañe algo la película, pero cómo a lo mejor fueron realmente así, tampoco me voy a cebar en ellos (básicamente el doctor “buena persona”, pero que al fin y al cabo pertenece a las SS; el personaje del niño tampoco me acaba de convencer del todo).
En general, una película muy buena, que además aprendes algo de historia (yo por lo menos, ahora he conocido al resto del “equipo” nazi: Goebbels, Himmler y demás), con una GRAN interpretación, a mí parecer, de Bruno Ganz. Y la sensación de que (casi) todo lo que ves pasó de verdad (ensalada de suicidios incluida, algunos verdaderamente impactantes).