Esta película no me ha convencido, y es una pena, pero aunque es agradable para la vista sin demasiados esfuerzos de encuadre (que tampoco necesita), resulta algo sosa en muchos momentos. El hecho de que los personajes lo sean no se resuelve haciendo que todo sea así, hasta el paisaje, que tampoc es para echar cohetes.
La trayectoria del matrimonio, demasiado tranquilo y comedido, no me da la excusa perfecta para interceptar el concepto de encuentro de intercambio al menos en la forma y manera en que sucede en el film, tan obligatorio, no sé, a mí al menos no me ha llegado ese clima de autoatracción tal que la cosa fluya de manera tan natural.
Por último, haciendo un gran esfuerzo por terminar la película que se acababa con el segundo intercambio consentido y punto, aparece otra pareja, algo de humor fuera de lugar y una desesperación de niño infantil que desde luego desentona con la tensión y tristeza que muestran de manera inmediatamente después.
Puede que los profundos hincapiés psicológicos consiguan hasta peritar que la actitud es natural, pero para esta película, no hay fuerza de guión, y ella sobreactuada en todo momento, acaban por hacer del film un pasar de escenas con un par importantes.