Está claro que Iciar Bollaín juega al juego del cine español. Su cine pertenece no sólo por nacionalidad a España, sino también por género. El consabido género “cine español”. Esto, de entrada, ya es malo. Hoy por hoy es como hacer terror japonés o comedia francesa, está agotado. Ahora bien, dentro del juego hay quien juega mejor y peor, la directora madrileña es de las que mejor juegan.
Cada película suya se convierte en éxito de crítica y moderado éxito de taquilla, todo el éxito que puede tener el género. Ahora participa en la sección oficial del festival de San Sebastián, como ya hiciera anteriormente con Te doy mis ojos, que se hizo con sendas conchas para ambos protagonistas, además de otros premios especiales para la película.
Lo mejor de todo es que ahora viene a contarnos un argumento con una excusa distinta. No sigue las pautas de la ética de moda, como en el caso de los malos tratos, sino que llega con una historia de detectives. Bien mirado, viene a ser posiblemente el argumento más agotado del mundo, pero lo que me interesa es la intersección entre el cine de detectives y el género cine español, pues me costa que las relaciones personales serán realmente la base de la película, y no el ornamento detectivesco. De ahí puede salir un híbrido interesante y fresco. Hay esperanza para los que esperan algo más.
Ayudará la presencia de ese misterio hecha actriz que es Nawja Nimri, quien ya estuvo el año pasado en el Zinemaldi con una interesante y distinta película policiáca, Las vidas de Celia. Creo que se va a llevar todo el peso de la interpretación. Con ella un actor curioso, Tristán Ulloa, que tiene una interesante fragilidad intensa. Le vimos en Lucía y el sexo y hace menos tiempo en Salvador.
Si la película se centra, tiene el suficiente valor dramático como para dejar atrás moralinas y mensajes – y por favor, no quiero feminismo cargante – esta puede ser una buena opción. La factura será más que aceptable y las interpretaciones en general serán buenas. La dirección será la justa.
Los amantes del cine español como género que no lo duden. Esta será una de las películas españolas del año.