Crítica de la película El incidente por William Munny

"Lo impensable está sucediendo", éste es el título lapidario que secunda la nueva película del genial, para algunos, M. Night Shyamalan. Es hasta insultante tener que recordar su carrera llena de éxitos y poca indiferencias detrás de films como EL sexto sentido, Señales, El protegido, El bosque o La joven del agua. Esta última película le coloca más en la cuerda floja que nunca, ya que provocó que muchos no desearan tener más paciencia con sus guiones y giros de enroscados. Yo piendo que una vez más, su punto de vista particular, y su capacidad de movimiento y encuadre de cámara, le ayudarán a tener los mismos enemigos que detractores, a mí me convence y ya va 5 films más este que se presenta.

El nuevo curioso caer de escenas que nos presente con sus historias extrañas, será lo de menos a la hora de sentarme ante el film, sé que me va a enganchar, aunque me engañe vilmente, aunque vuelva a contarme un cuento de hadas, su capacidad de atracción es tal que me siento irremediablemente magnetizado a su cine. Y creo que somos muchos ya.

Curiosamente, esta vez le ha costado horrores y algunos cambios el introducir su guión en las productoras, incluso llegando al punto de no ser catalogada una película apta para menores, ¿qué maravilla nos tendrá preparada?. Cualquiera sabe, la vuelta a su estilo de los primeros films dicen algunos, yo creo que simplemente vuelve a mostrarnos cosas desde otro punto de vista singular y mágico.

Mark Wahlberg (Infiltrados o en la próxima en estrenar La noche es nuestra) es el encargado de mantener el papel protagonista de padre de familia en una película en la que compartirá minutos con un referente femenino menos conocido, Zooey Deschanel (Novia por contrato o en la próxima The good life). John Leguizamo (El amor en los tiempos del cólera o Asalto al distrito 13 entre otras) pululará por el film como secundario poderoso. Una cosa si me parece, puede que estemos ante su película más comercial, dentro de lo que cabe, y no me importa nada. A disfrutar.