Lo que da miedo de esta película es su director, Mike Newel, o dicho de otro modo “Cuatro bodas y un funeral”. Y esa, sin duda, es la mejor de sus películas.
Vale que la edad y la situación cercana a momentos prerománticos haga que este director pueda estar medianamente justificado, pero eso no quiere decir que esté justificado en una película de magia y extrañeza como esta.
Su anterior director, Alfonso Cuarón, le dio a esta saga una dimensión muy superior a las dos primeras, con atmósfera y muchas sensaciones. Esto, sin duda, se va a perder. A los productores no les interesa.
Pero cualquier pensamiento de estos es indiferente. La base, las novelas, es suficiente como para hacer de estas películas piezas interesantes. Además esta novela tiene un planteamiento algo diferente y creo que va a aportar muchos aspectos interesantes. La saga crece, más oscura y más interesante. Lástima de director.