Crítica de la película ¡Soy un pelele! por William Munny

Esta película parece ser un homenaje precisamente al cine español, ese de directrices muy marcadas, de personajes de siempre que podemos reconocer sin problemas en cualquier producción, ese un poco casposo y fácil que se alimenta de las líneas de la comedia, ese que ha ido evolucionando hasta ser ya muy poco apreciado. Pretende por tanto hacer bien una película que trata del cine que se hacía mal (aún exite algo), que hacía gracia porque no se aspiraba a más.

Siendo del 2007 podemos hacernos una idea de la poca chispa que puede tener el film, a pesar de un intento de trabajo medido entorno a los encuadres de cómic, sacando el relieve de su estética. Al menos se podrá observar ese esfuerzo en medio de estereotipos que incluso haciéndolos en serio no terminarán de animar a un espectador serio que ya no quiere saber nada de sencillez por el hecho de serlo. La película no será sencilla, pero tendrá valores de la sencillez que habrá que quitarse de encima haciéndola poco atractiva.

Roberto Sanmartín, el actor cubano conocido por la serie de televisión Aquí no hay quien viva, será el encargado de tener el total peso de la comedia. Está preparado, de sobra para esta producción mezcla. Ya lo pudimos ver en films como Che 2 Guerrilla, Atasco en la nacional o La dama boba.