Añoro aquellos años en los que ir a la Semana de terror era asegurarse el fliparlo absolutamente todo... con todo lo que se veía.
Recuerdo Visitor Q de Miike Takashi que hizo que la mitad del cine huyera despavorido y que, a los que la vimos, nos hirió la sensibilidad enormemente. Así me he quedado.
A lo largo de los años cada vez hemos salido menos volaos del cine. En gente normal esto sería de agradecer. En gente normal. Yo lo hecho bastante de menos. Espero que ésta película me devuelva un poco a aquel mundo, aunque sé que nunca volverá.