Juventud, dureza, problemática general con jóvenes de siempre, de cine que muestra un aspecto marginal que acaba por dar ideas para películas, la mayoría menores, con también mayores o menores adornos que las hagan más plausibles.
En este caso, el potencial del film es bastante interesante, pero puede que hasta ese punto llegue y listo, conociendo que la temática de fondo, el trasfondo es provocado con alegría para tratar de enganchar a un público que se implica poco con el cine español.
El resultado puede que sea una película reciente, adapatada a los nuevos tiempos con problemas que ya hemos visto, pero que no por ello dejará de pertenecer a esos films que no puedieron más. No es poco.
Israel Rodríguez (No digas nada), es el joven con ganas que se desnuda dándolo todo ante una oportunidad de oro para hacerse con un protagonista goloso. Antonio Hens, el director y guionista repite con este actor tras En malas compañías.