Puede hacernos gracia pero nunca será una buena película. Puede hacernos gracia por llegar a cotas de ridículo voluntario que nunca imaginaríamos. Caricaturesca, grotesca, tópica y bruta. Todo eso es esta película.
Y lo que no es... no es una de esas películas prefabricadas sobre adolescentes y porros, tampoco es el piloto automático de las parodias de las películas del año. No es una comedia romántica Sandra Bullock. No es una elección de guión fácil, aunque no nos engañemos, el humor sí que lo será.
Su director y guionista (vaya, cine de autor) es Jared hess, quien eso sí, viene ayudado en el apartado de guión. Tiene un curriculum muy reducido pero concreto: “Napoleon Dynamite”, una comedia un tanto particular.
El protagonista, nunca mejor llamado así, es el irreverente Jack Black (“King Kong”, “Escuela de Rock”), que solo terminó de convencerme en “Alta fidelidad”. Pero en fin, aquí está en su salsa y espero que eso no sea un punto en contra. Para quien le haga gracia.
Apurémonos, se acaba el verano, las buenas películas están llamando a las puertas y después no tendremos razón alguna para disfrutar de esta tontería.