Crítica de la película Margin Call por Iñaki Ortiz

El cine, como no puede ser de otra manera, tiene su punto de mira en esta terrible crisis, y ya nos ha dejado algunos documentales interesantes sobre el tema. El más esclarecedor seguramente sea el ganador del Oscar, Inside Job. Ahora tenemos una película que también quiere situarse en el origen de todo esto para observar los porqués, los cómos y los quiénes, pero esta vez en clave de ficción que, obviamente, en su contexto será cualquier cosa menos ficción.

Su director, J.C. Chandor, afronta con esta su ópera prima, y ya hay quien ha achacado a su poca experiencia que la obra sea demasiado "teatral", aunque cuidado con este término que no siempre se usa como debiera. Por lo demás, tuvo bastante buena acogida por la crítica en la Berlinale.

Teatral o no, lo cierto es que tiene un repartazo, encabezado por dos intérpretes de la talla de Kevin Spacey y Jeremy Irons. Simon Baker, conocido en televisión por El mentalista o El guardián y que cada vez se asoma con más seguridad a la gran pantalla. Exactamente lo mismo se puede decir de Zachary Quinto (que pasa de Saylar de Héroes a Dr Spock). Y dos verteranos eficientes como Stanley Tucci y Demi Moore. Vamos, un reparto bien surtido.

Quizá no sea tan precisa ni tenga tanto contenido como sus predecesoras documentales, pero es una buena oportunidad de pasar un buen rato con este thriller dramático, al tiempo que nos indignamos un poco más (si cabe).