Hasta ahora, he defendido esta saga, porque me pareció algo novedoso en el género de terror. Disfruté muchísimo de la primera entrega, mas psicológica y angustiosa, con un malvado digno de ser recordado. Un toque diferente pero que te mantenía atento a la pantalla le vi a Saw II, con escenas realmente sacadas de una cabeza muy retorcida. Y en Saw 3 sufrí lo indecible con el nivel y la cantidad de imagénes super asquerosas, entrelazando la historia con las otras dos.
Pero se acabó. El nivel ha ido bajando en calidad, que no en repugnancia, y no creo que remonte precisamente ahora. Para todo aquel que haya visto las anteriores, sabrá que va a ser muy difícil y muy rebuscado todo aquello que elijan para continuar con la trama y para los que no las hayan visto, ya os lo digo yo. Y eso que no pienso perdérmela, pero está visto que aquí hay un filón de oro hasta que la gente se canse, y lo piensan amortizar. Nada mas lejos, Tobin Bell, el actor que encarna a Jigsaw, ha firmado por dos películas más. Ahí queda todo dicho. Y como no, el estreno, el fin de semana anterior a Halloween. Puro marketing.
Mucho se comentó en su momento sobre quien iba a dirigir esta cuarta entrega. Sonaron los hermanos Pang, responsables de otros títulos de terror como The Eye o The messengers. Pero finalmente será otra vez Darren Lynn Bousman, encargado de Saw II y Saw 3, con el que sabemos que habrá sangre y vísceras por doquier. En el guión, sin embargo, tenemos dos nombres nuevos. Sustituyendo a Leigh Whannell, que había dejado su huella en toda la saga hasta ahora, tenemos a Marcus Dunstan y Patrick Melton, con practicamente nada que contar de su filmografía.
Para los seguidores mas aférrimos, algún apunte mas sobre el reparto. Aparte del mencionado Tobin Bell, y el rumor que surgió algún tiempo de la aparición de Jessica Alba (con lo que hubieramos disfrutado todos viendola sufrir), finalmente aparecerán Lyriq Bent como el Comandante Rigg, Costas Mandylor como el DetectiveHoffman, Angus Macfadyen como Jeff Denlon, Betsy Russell como Jill y Shawnee Smith como Amanda. Así que alusiones a las demás entregas no faltarán.
Está claro que, los que vamos a ver esta película, buscamos carnaza, y eso seguro que lo vamos a encontrar. No como pasó con Hostel 2, que salvo el final, resulta una película terriblemente tediosa. Aquí las torturas espero que salten casi unas encima de otras y con tal de que no se excedan demasiado en las vueltas de tuerca, me conformaré. Pero no espero nada novedoso ni sorprendente, solo pasarlo mal un rato en la sala. Asi que todo aquel que no disfrute viendo sufrir al personal, que siga buscando en la cartelera.