Desde Brasil nos llega una propuesta bastante original que ya se ha hecho con varios premios en diferentes festivales del mundo. Estómago, de Marcos Jorge, un director casi primerizo, exceptuando su primer trabajo Corpos celestes, que también tenía un argumento bastante pintoresco. En el festival de Valladolid de este año, la película se ha hecho con la espiga de oro, además de recibir un premio para su protagonista Joao Miguel (compartido con Unax Ugalde), el premio al mejor nuevo director y el premio del jurado joven. En definitiva, la gran triunfadora de la Seminci.
La película usará como telón de fondo la cocina, para hablarnos de desigualdades sociales y especialmente de la dignidad del hombre. Lo mejor es que, en una primera lectura, sin entrar en su mensaje, seguramente el guión estará bien cuidado de manera que resulte ameno e interesante.
El cine brasileño está bastante fuerte, especialmente si atendemos a las nuevas generaciones, a gente como Fernando Meirelles. Se trata, por lo general, de un cine con bastante energía y ritmo, haciendo bueno el tópico de la zona.
Para espectadores capaces de ver más allá de una cacerola.