Crítica de la película Crash por William Munny

La excesiva animosidad con la que la película desde el inicio se muestra como filósofa de sí misma, con un arranque esperanzador pero que nada tiene que ver con el pasar de escenas cortadas a piñón por la eterna disputa de casualidades del guión, solo me hace pensar en la necesidad napoleónica de conquistar todos los resquicios del cine, y las tendencias modernas como "Magnolia", con el fin de acabar en un ejercicio de sobrevaloración de los personajes y demasiadas ansias por triunfar, en una palabra, presuntuosa.

Los detalles, bien colocados en algunos momentos que os hacen pensar en la globalidad del film son lo único que la mantiene firme ante la pasmada y agotada línea de acontecimientos, en algunos casos exagerados, en otros a presión por necesidades de la historia hermética y simple por complicada. Una banda sonora a ratos, unos aspavientos y giros de situación desorbitados y algo caros para que las reacciones de los personajes sean firmes y creíbles. Sin duda un nivel técnico autorizado, pero el regusto final de una historia pasada por agua, con final simplista e imitaciones descaradas, la dejan en el lugar atónito que le corresponde,la segunda fila de su género, poco convincente aunque rozando el larguero en muchos momentos.

Desangelada, forzada, una vela que se apaga dulcemente.