Los creadores de Casi 300, han vuelto a aprovechar el hueco que todos los años queda para las películas de parodias, para al parecer rizar el rizo y destrozar el mundo del cine con productos como este, enteramente carentes de gracia. Yo, uno de los que animan a ver estas producciones sin verguenza ya que son lo que son, no puedo ni siquiera invitar a estas que no es nada o prácticamente nada.
Antiguamente aún se podía uno divertir con chistes acerca de las películas más importantes, pero lo peliagudo era que llegaban a tener cierta consistencia, daban en el clavo o al menos se hacían de forma original, ahora la exageracción es tal, la sacada de quicio es tan brutal que los minutos pasan lentamente como en una agonía prolongada. Sin entrar en detalles sobre las películas parodiadas, como pista las más ridículas y megataquilleras, para no estropear la sorpresa a algunos que aún pretenderán verla. Hacen bien, ellos mismos si son capaces de asimilarla sin tóxicos. Al menos os pediría que esperárais al alquiler.
Carmen Electra (Christmas in Wonderland o Scary movie 4) vuelve a meterse en estos temas con total impunidad.