Hablaría algo del director, escritor o protagonistas de ésta película, pero es que no les conocen ni en casa a la hora de comer. Se trata de un reparto de chicos y chicas "guapos". Mucho músculo y mucha teta para un subproducto de mamporros que mezcla lo peor de Van Damme con lo peor del musical High School.
Me sigue sorprendiendo que valga la pena estrenar en nuestras carteleras productos que han sido creados por y para el público americano. En una época donde la gente va cada vez menos al cine, no puedes esperar que haya gente que caiga de forma despistada en una sala donde dan ésta chorriflautada. ¿Quizás me equivoque?
Resumiendo: no pierdan el tiempo viendo ésta película. Y no se lo dice precisamente el precrítico con el morro más fino. Me encantan los mamporros bien dados de Seagal, el hortera de Van Damme o cualquier héroe de acción. Pero ésta especie de Karate Kid Universitario, no hay por donde cogerla....