Es un tópico, casi una frase unida al nombre: François Ozon, el Almodóvar francés. Es
posible que esta misma etiqueta le haya impulsado a forzar el homenaje y hacer
su película más cercana al manchego. Las referencias son evidentes. Por
supuesto, el elemento del travestismo como tema central, con el fetichismo
de la ropa que él mismo se cose. Pero también los cuidados en el hospital, al
estilo de Hable con ella. O la escena
del espectáculo travesti, muy en sintonía con Tacones lejanos. El uso de la banda sonora también le es cercano,
en especial a la última etapa de Almodóvar.
Hay elementos Hitchcockianos, claro, especialmente de Vértigo, por lo evidente, pero también
de Rebeca, y la idealización y presencia de la
mujer muerta. Aunque no deja de ser otro puente que pasa por Almodóvar, que
gusta de llevar a su terreno este tipo de dramas, como aquí lo hace Ozon.
La película se debate entre la comedia ligera y el drama de
tintes psicológicos algo oscuros. Como ha dicho el director en la rueda de
prensa, se trata de una película "transgénero". Los momentos cómicos, colocados
especialmente en la primera mitad, no funcionan demasiado bien a mi juicio.
Tienen cierto tinte de comedia casposa con chistes de mariquitas algo
desfasados. Cuando la película se acerca más a los problemas de los personajes
es cuando funciona mejor. Sin llegar a ser sórdida, sino más bien con cierta
tranquilidad, pero dejando asomar una serie de complejidades mentales en los
personajes, relacionados con el duelo y con las fantasías sexuales reprimidas.
Y con ambas cosas unidas. Y por supuesto, el aspecto de la
identidad sexual, necesario, cual cuento de la bella durmiente, para revivir a
la princesa.
Ozon cuida una estética clásica de travestismo muy
fetichista, con saltos de cama y con referencias al cine más clásico, de lujo y
esplendor, con esa gran escalera propia de otro tiempo, que usa una y otra vez
para mostrar al protagonista subiendo y bajando con sus altos tacones.
No es esta una de las mejores películas del director, y como
ya he dicho, considero algunas partes algo irregulares, pero creo que poco a
poco la película va tomando su propio camino, en el homenaje y en su voayerismo
de las ambigüedades interiores.